En este artículo se estudia la demanda de textiles por parte de las families castellanas de la provincia de Palencia entre 1750 y 1850. A partir de un análisis sistemático de inventarios post mortem, se constata un aumento en el consumo de bienes textiles que afectó a todas las capas sociales ubicadas tanto en entornos urbanos como rurales. No obstante, existían una serie de límites al desarrollo de la demanda y del consumo: pervivencia de crisis de subsistencias y mortalidad, lento crecimiento demográfico, fluctuaciones en los niveles de precios agrícolas, integración de los mercados no uniforme, incremento de la masa de indigentes, excesiva concentración de la riqueza, etcetera. La existencia de estos límites incidieron en el resultado final: una revolutión industriosa sin industrialización.